No quiero tocarte y te miro con apetito. Me resisto mover la mano hasta tu mano. Imagino, mientras espero, que es tu mano la que viene a mi mano y me toca hasta dolerme la piel. Miro, no muevo la mano, no mueves la mano. Me duermo y sé que amaneceré casado y solo.
1 comentario:
Nada de comentarios, parcero. Solamente dejo la huella de mi sintonía. Un abrazo.
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